Bitácora semana 1

 

 

Un inicio detallado 

    Sin duda alguna empezar esta clase me tenía llena de expectativas. Como muchos de mis inductores y compañeros aseguraron, Información y Documentación es un curso para tomar a finales de la carrera. Retomar los puntos claves del arte de escribir es necesario para la tesis, y aunque aún me resten unos cuantos semestres para consolidar este trabajo, por fin decidí dejar de postergarla. De esta forma, no hay mejor manera de empezarla que haciendo un recuento muy detallado de las primeras clases de este curso. 

 

    En la clase del 25 de enero del 2021 el profesor Juan Sebastián Cobos realizó una pequeña introducción sobre su perfil y su propósito con la clase. El docente hizo énfasis en la importancia de interactuar y participar durante las sesiones, especialmente debido a la modalidad virtual. De esta manera, cada uno de los estudiantes realizamos una pequeña presentación personal donde expusimos nuestra carrera, semestre, nuestras referencias o expectativas de la clase y nuestros hobbies. También, se dio el espacio para realizar preguntas a cada compañero con el fin de conocernos mejor. De esta manera, surgieron diferentes anécdotas y temas de conversación. Posteriormente, el profesor presentó el programa de la clase, en donde recalcó el objetivo de entablar un pensamiento crítico del uso y acceso de la información académica. Igualmente, introdujo los temas del curso con la premisa de que tener mayor información no es sinónimo de tener mayor conocimiento, lo cual profundizaremos en la siguiente clase. Finalmente, esta sesión culminó con la explicación de los medios y porcentajes de evaluación: el parcial corresponde al 30%, los talleres a un 20%, los informes y exposiciones al 20% y el examen final al 40%. 

 

La segunda clase correspondiente al 27 de enero el profesor la introdujo a partir de la pregunta ¿Cómo aprenden los estudiantes? De esta manera, nos presentó el cono del aprendizaje de Edgar Dale, el cual expone las actividades que propician la menor y mayor retención de conocimiento. En efecto, después de dos semanas recordamos el 10% de lo leído, el 20% de lo escuchado, el 30% de lo visto, el 50% de lo escuchado y visto, el 70% de lo dicho y el 90% de lo dicho y hecho. Mientras las primeras cinco acciones son de carácter pasivo,  lo dicho y hecho son actividades participativas y puras, es decir, de carácter activo. Siendo así, Juan Sebastián aplicó su enseñanza a partir de la presentación de un video donde se explica el mismo cono. Esto me hizo tomar conciencia de la importancia de participar activamente en clase para aprender y retener mayor información. Por lo cual, encontré aún mas motivación para las actividades y dinámicas virtuales propuestas por el profesor a lo largo del curso. 

 

Seguidamente, iniciamos a manejar el contenido de la clase a través de una actividad grupal en donde debíamos definir los conceptos: dato, información, conocimiento y sabiduría. Con el grupo 3 discutimos las consideraciones personales sobre cada término a partir de investigaciones en internet, luego realizamos una lluvia de ideas sobre cada concepto y a través de una presentación de power point expusimos lo encontrado. De esta forma, concluimos que cada uno de los conceptos está entrelazado de manera jerárquica. Inicialmente, un dato corresponde a la expresión mínima y concreta de contenido de un tema con el fin de analizarlo y/o estudiarlo. Posteriormente, se encuentra la información, la cual catalogamos como el conjunto de datos procesados y ordenados para su entendimiento. Así mismo, continua el conocimiento, el cual corresponde a la acción de recibir la información de forma crítica (saber si es verdadera o falsa) a través de la razón. Este concepto va ligado con la capacidad de aprendizaje. Finalmente, la sabiduría es la aplicación del conocimiento adquirido a través de la experiencia y el buen juicio, guiado por los valores. En este punto ya se tiene en cuenta en mayor medida la calidad de la aplicación de los conocimientos y se evalúa o reflexiona sobre el propósito de su aplicación.

 

De esta forma, continuamos la clase con la presentación de las habilidades de pensamiento en su orden ascendente: recordar, aplicar, analizar, evaluar, crear y publicar. Así pues, el fin último de los estudiantes, especialmente de los comunicadores sociales, es crear y publicar. Por lo cual, el docente reiteró la necesidad de emplear estas habilidades de pensamiento de manera progresiva para llegar a publicar contenidos de calidad. A partir de esto, Juan Sebastián nos presentó un gráfico que da cuenta de la necesidad de expandir y salir de la zona de confort para aprender por medio de nuevas experiencias. Este fue un aspecto para aplicar la reflexión personal. Así pues, reconocí mi necesidad de salir de mi zona de confort y no solo en ámbitos académicos, sino para la vida diaria. De ser así, podré experimentar nuevos métodos, perspectivas y conocimientos con el fin de crecer como persona, como estudiante y como futura periodista. 

 

 Ahora bien, la última actividad realizada fue la lectura de una nota sobre la renuncia de un profesor de la facultad de Comunicación y Lenguaje de la Javeriana debido a que sus estudiantes no tenían buena ortografía. En el texto el profesor aseguró no entender las nuevas dinámicas y lógicas de los estudiantes. La voluntad y énfasis sobre la escritura, sobre la buena redacción y ortografía era poca por parte de los universitarios, lo cual resultaba ser frustrante. Ahora bien, Juan Sebastián aseguró haber tenido experiencias similares con algunos estudiantes a lo largo de su carrera, sin embargo, su objetivo como docente es trabajar en conjunto para mejorar esto. Esto nos llevó a reconocer y reflexionar sobre la importancia de la escritura, pues el profesor nos la planteó como nuestra carta de presentación personal y profesional. 

 

Siendo así, culminamos la sesión con la participación de algunos estudiantes, en la que nos compartían sus enseñanzas del curso durante esta semana. Así mismo, recordamos las tareas asignadas: la bitácora semanal, las lecturas y los documentos asignados para la siguiente semana, junto con su respectivo control de lectura.